Hay una trampa en la que el ser humano en su inconsciencia cae una y otra vez,
exigirle, reclamarle a la vida, a los demás, lo que se está negando a sí mismo.
Lo primero, es reconocer que se cae en eso, luego,
es posible que se produzca la transformación.
Cuando no nos sentimos bien, es porque hay un pensamiento ó varios,
que necesitan ser conscientizados, reconocidos y discernidos,
el punto es que en nuestra inconsciencia,
nos los creemos, los asumimos como una verdad,
sin pasarlo por el tamiz de la consciencia, de la Presencia...
Un maestro y guía al que he acudido,
y que me ha acompañado a lo largo de los años,
me dijo hace unos cuantos años, en uno de nuestros reveladores encuentros:
"La raíz de los problemas humanos está en la persistente idea de carecer de algo",
desarrolla y trabaja con esto en las personas que llegan a ti
y que tienes a bien recibir en tu consulta. Y así lo he hecho...
En muchas ocasiones, esa idea está tan cristalizada en el inconsciente,
de las más diversas formas y con las particularidades de cada quien,
que necesitamos que algo ó alguien en nuestro exterior
nos sacuda lo suficiente para mostrárnosla,
y la podremos ver sólo en el caso de que tengamos la disposición a verla...
Lina Cristiano
Psicoterapeuta y Coach de Vida